Varios expertos recomiendan evitar el contacto directo del gel hidroalcohólico, sobretodo si éste es perfumado, con el cuero y las perlas. Pues son los materiales que más se pueden ver perjudicados con estos productos. Así como también el rodio en las joyas de oro blanco, que probablemente se decoloren con mayor rapidez con el contacto con todo tipo de geles desinfectantes que utilizamos a diario. Por lo que deberemos de tener un mayor cuidado con todas las joyas de oro blanco.
En el caso de la plata y de las piezas de plata bañadas en oro, en un principio no preocupan. Pero si que se recomiendan desinfectarlas con mayor frecuencia, con agua y jabón neutro como hemos mencionado anteriormente. Aunque una manera muy rápida y eficaz es mediante ultrasonidos. Lo más seguro es que no dispongáis de estas máquinas en vuestras casas, pero os facilitarán el servicio en las joyerías con taller. De todas formas, éste método también se puede hacer en casa calentando una olla pequeña de agua a 30-40 grados aproximadamente y mezclarla con jabón, a continuación frotar la pieza con suavidad con un cepillo. Es muy importante que sequéis bien las joyas con un paño de algodón para que no queden restos y así evitemos las manchas en la pieza. ¡Fácil y rápido!
La preocupación se extiende cuando hablamos de piezas con materiales preciosos como esmeraldas, perlas o turquesas. Aquí el daño si que puede verse reflejado con el uso de los geles hidroalcohólico, según los expertos. Recomiendan en cualquier caso evitar el contacto con estos materiales, para conservar las joyas en perfectas condiciones. Con el resto de los materiales preciosos, estos productos pueden considerarse inofensivos, por eso no debemos preocuparnos. Los brillantes aguantan perfectamente, así como el oro y la plata, que tampoco se verán perjudicados.
¡Esperamos haber sido de gran ayuda!
Hablamos pronto.
Infinity Mia